Yoyó y Tutú son dos personajes cómicos ambulantes que van por los pueblos y las plazas haciendo juegos de magia y pompas de jabón. Guardan un secreto que sólo ellos conocen: la manera de hacer burbujas para que los sueños se hagan realidad. El problema es que Yoyó siempre se lleva todos los aplausos, porque él hace los juegos, trabaja de cara al público y decide lo que se hace y lo que no. La pobre Tutú, en cambio, siempre entre bambalinas, tiene que hacer lo que Yoyó le ordena y encargarse de todos los trabajos que él no quiere hacer: llevar y traer las cosas, colocarlas, ordenarlas, limpiarlas y tenerlas siempre a punto para la siguiente función. Un día, Tutú decide que ha llegado la hora de hacer sus propias pompas y ser ella la protagonista.